Hoy tendremos por primera vez en dos años un Consejo Editorial. Antes habíamos tenido una especie de reuniones anárquicas donde tratábamos sobre lo humano y lo divino sin marcarnos excesivos rigores. Me ha llegado hoy un vídeo que se hizo en junio donde de forma resumida intentaba describir que era esto de Séneca en un encuentro en Barcelona titulado Management y Espiritualidad. Mi explicación en el mismo sobre lo que yo llamo «Nueva Cultura Ética» ha creado un poco de confusión, así que lo explicaré en un próximo comentario.
Paso el link sobre el mismo:
(Foto: Javier León presentando orgulloso uno de los libros editados con gran esfuerzo pero también con gran satisfacción. Barcelona, junio de 2008)
CREANDO UTOPÍAS 
Excelente entrevista. Quizás deberíamos abrir una campaña de ayuda financiera a Séneca? Me gustaría saber qué pensáis los 4 socios.
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Ciertamente te has embarcado en una aventura arriesgada e inusual, cuanto menos. Hoy día, las empresas fijan sus objetivos en la pronta recaudación de cuantos más beneficios mejor.La satisfacción de conseguir ideales; de realizar proyectos no remunerados económicamente, aunque sí, éticamente; o, simplemente, aportar esfuerzo, tiempo y trabajo en beneficio de la comunidad, son valores que, en los tiempos actuales, se cifran negativamente. Desde aquí levanto la voz a favor de aquellos hidalgos que se empeñan en seguir cabalgando por áridas llanuras de lo correcto, luchando contra gigantes del consumismo por defender su ideal.
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Si, pero no confundamos. Las cosas, para que funcionen, tienen que ser rentables, es un principio básico de responsabilidad individual: el ser autosuficiente sin necesidad de tener que depender de terceros. Y no es incompatible ser un mecenas cultural con mantener el adecuado equilibrio financiero. Es muy importante pensemos en esto.
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Tienes razón Joaquin, Séneca debería ser una empresa rentable. Hemos sufrido la crisis del crecimiento, inyectando mucho dinero para poder estar presente en todas las librerías gracias al canal convencional de distribución. De ahí que ahora vayamos a estar unos meses apurados. Pero confío en la recuperación, a pesar de que, valga la paradoja, las ventas se han reducido drásticamente.
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