Desde Copenhague…


Fue un viaje largo pero se me hizo corto. No hubo ningún problema, ningún accidente. El primer día atravesé toda Francia y prácticamente toda Alemania a buen ritmo, sin acelerones. Dormí de un tirón en el coche es misma noche ocho horas seguidas, a pesar del frío, en algún lugar del norte de Alemania. Pensé que llegaría el domingo a Dinamarca pero el sábado por la mañana ya estaba cruzando todo el pequeño país. Al mediodía ya estaba en mi destino. Estoy instalado en el barrio de Ama, un lugar tranquilo muy cerca del famoso barrio de Cristiania y del mismo centro. Ayer tuve tiempo de pasear y poder ver, a pesar de la lluvia que no cesa y el frío intenso algo de la ciudad. Me resultó extraño ver a la gente divertirse en el Tivoli, un parque de atracciones que funciona a pleno rendimiento con frío y lluvia incluidas. La lluvia fina está mimetizada en el paisaje y las gentes lo asumen con toda normalidad. Pocos llevan paraguas y muchos viajan en bicicleta o se suben a la noria y la montaña rusa del Tivoli a pesar de la lluvia. Curioso es ver que existe una importante colonia de inuits, habitantes procedentes de Groenlandia, territorio danés cuya extensión, curiosamente es mayor que la de la propia Dinamarca.
(Foto: Una calle cualquiera de Copenhague, o de Kobenhavn, en danés, diciembre de 2008)

3 respuestas a «Desde Copenhague…»

  1. Me alegra estés ya alli. Sigue mandando fotos pfv, nos gustará ver la ciudad. Está bien descrito cómo se adaptan al clima, yo también pienso que para disfrutar de una noria hace falta sol…

    Me gusta

  2. Los países nórdicos conciben la vida en diferentes tonos de grises que les hacen ver la vida desde una perspectiva más fría e insensible.Para los nacidos en nuestra Península Ibérica puede llegar a ser una tortura china vivir privados de la mejor fuente de energía que nos inyecta cada día la alegría y el carácter para saber vivir como se merece.Buena estancia Javier

    Me gusta

Replica a joaquin tamames Cancelar la respuesta