Viajar es gratis


¿Cuánto pagaríamos por viajar en un maravilloso crucero alrededor del sol? ¿Y cuanto pagaríamos por ir al planetario más espectacular del universo? Esas cosas son gratis. Todos los años hacemos un viaje alrededor del sol en la nave tierra. Todas las noches podemos asomarnos y disfrutar del universo entero mirando por nuestra ventana. Y si además de tener capacidad para ver esas cosas, la tenemos para observar en lo pequeño, no dudéis en agachar vuestra vista en el próximo jardín que veáis. Hay un mundo ahí abajo lleno de miles de criaturas. Cuando paseo por mi jardín me gusta hacerlo agachado, inclinando la vista a cada uno de los rincones. Os aseguro que la visión es increíble. Es como si otro mundo viviera ahí debajo de nuestros pies y no fuéramos capaces de verlo. Pero cuando aprendemos a observar en silencio y escuchamos los conciertos de la naturaleza, sus majestuosas vistas y a todos los placeres que nos rodean, uno no puede más que estar agradecido maravillado por tan generoso espectáculo. ¿Qué más podemos hacer gratis? Solo debemos agudizar el ingenio y la visión, tener consciencia de todo cuanto se nos da a cada momento y sabernos partícipes de este maravilloso regalo que es la vida.

¿Qué más podemos pedir? Constatada dicha generosidad, ya solo nos queda participar en la misma y entregar nuestra parte. Y que dicha parte sea una constante renovación interior, un fortísimo anhelo de cambio hacia mejor, una proyección positiva sobre la vida, pero también una revisión crítica y autocrítica de aquello que pueda mejorar. Un idílico romance entre el yo y el superyo, entre la personalidad y el alma, entre el nosotros y el ellos. Una apuesta firme por sentirnos merecedores de todo cuanto nos hace vivir todos los días.

Han pasado algunos minutos desde que empezaste a leer este texto. Han sido unos minutos de intensa vida. Da gracias por ello, da gracias por sentir y estar aquí, da gracias por crear una realidad más amable.

3 respuestas a «Viajar es gratis»

  1. La vida es increíble , lo tenemos todo y no lo vemos, se nos escapa a través de los dedos , nos acordamos de lo vulnerables que somos, nos entristecemos. Un viaje de paso con tarjeta de caducidad, un mundo irreal o real que no vemos , tenemos una venda en los ojos espero que no sea demasiado tarde.

    Me gusta

Deja un comentario